Buscar este blog

:

:

Entrada destacada

¿Qué hiciste hoy para conciencitizar sobre la defensa de la vida?

Hola, te invito a que pienses que puedes hacer, desde tu lugar, para ayudar a la defensa de la vida. Por ejemplo puedes proponer reunion...

sábado, 22 de octubre de 2011

La oración de los novios


Madre Nuestra:
En tu nombre hemos unido nuestros corazones. Queremos que presidas nuestro amor; que defiendas, conserves y aumentes nuestra ilusión. Quita de nuestro camino cualquier obstáculo que haga nacer la sombra o las dudas entre los dos.
Apártanos del egoísmo que paraliza el verdadero amor.
Líbranos de la ligereza que pone en peligro la Gracia de nuestras almas.
Haz que, abriéndonos nuestras almas, merezcamos la maravilla de encontrar a Dios el uno en el otro.
Haz que nuestro trabajo sea ayuda y estímulo para lograrlos plenamente. Conserva la salud de nuestros cuerpos. Resuelve necesidades materiales.
Y haz que el sueño de un hogar nuevo y de unos hijos nacidos de nuestro amor y del cuerpo, sean realidad y camino que nos lleve rectamente a tu Corazón. Amén.


Creados por y para el amor




 En nuestra vida cotidiana, encontramos a personas que se sienten solas, están tristes, deprimidas y en muchas ocasiones se encuentran rodeadas de familiares. En estos circunstancias lo que sucede es que estas personas necesitan amor.

El ser humano necesita del amor, por ello, es de suma importancia conocer lo que es el verdadero y auténtico amor; tomando como modelo el amor de Dios Nuestro Señor.

En la juventud cuando empezamos a experimentar el amor por el sexo opuesto y muchas veces pensamos que hemos encontrado nuestra media naranja. Sin embargo, podemos confundir el verdadero amor con lo que es una simple atracción, y esto, desgraciadamente, tendría unas consecuencias desfavorables para nosotros. Esto también puede suceder en otras edades, siempre podemos confundir el verdadero amor con una simple atracción.

Es muy importante saber encaminar el noviazgo como cristianos, es decir, según la voluntad de Dios. Para ello, es indispensable que hablemos del amor.

En primer lugar, nos enfocaremos en el tema del amor.

Debemos partir de la base de que Dios nos crea a todos por amor, puesto que somos sus hijos.

Nuestros padres al darnos la vida, cooperaron con Dios en la transmisión de su amor. Y es por esta transmisión de la vida que, el amor de un padre o de una madre a sus hijos, es un amor muy especial. A pesar, de las dificultades que se enfrenta una familia, un padre o una madre siempre sentirá un amor desbordante por cada uno de sus hijos. Este amor se verá claramente reflejado en muchas situaciones de la vida cotidiana. Por ejemplo, cuando una madre cuida y vela por la salud de su hijo enfermo, cuando un padre trabaja largas horas para darle una educación que le permita desarrollarse como persona, etc. 

Nosotros hemos encontrado a una persona del sexo opuesto que despierta un interés especial. Esa persona llena los anhelos, las ilusiones, los sueños de compartir nuestra vida con alguien. Y de repente, se desea estar con esa persona todo el tiempo y comienzan los planes...

Sabemos que estar enamorado es maravilloso, que el amor es bonito.
El problema que en ocasiones surge, es que reducimos el amor a tan sólo un amor de pareja y nos olvidamos de amar a todos los que nos rodean (parientes, amigos, vecinos, etc.) siguiendo las enseñanzas de Cristo. Cuando estamos enamorados, a veces caemos en el error de sólo amar a la pareja y egoístamente nos olvidamos que tenemos la obligación de amar a todos, incluyendo a los que apenas conocemos.

Analicemos el ejemplo de Cristo:

Cristo amó a todos por igual, hasta dar la vida por la humanidad en la cruz. Cristo amaba a su Madre muchísimo, de igual modo, amó a sus discípulos, los hombre tenemos un lugar muy especial en el corazón de Jesús, independientemente de nuestros defectos o cualidades.

¿cómo era el amor de Cristo?
Cristo nos enseñó a que el amor es entrega:, por eso se entregó y murió en la cruz para redimirnos de nuestros pecados, entregó su vida por nosotros.

Cristo nos enseña que el amor es servicial: siempre se dedicó a servir y a ayudar a todos, curando enfermos, haciendo milagros, enseñando a orar.

También nos enseñó que el amor es comprensivo, y sin envidia, pues su vida nos hace ver que sabía comprender todas las situaciones de la gente, fuera rica o pobre.

Nos enseñó que el amor no se deja llevar por la ira (enojo) sino que olvida las ofensas y perdona: en la cruz le dice a Dios: "Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen".
Esto es el verdadero amor. Cuando esperamos que los demás nos den, antes de que nosotros demos, estamos siendo totalmente egoístas. Siempre hay que pensar en hacer feliz al otro, ante todo. Cuando lo logremos encontraremos la verdadera paz y felicidad. Estaremos cumpliendo con la voluntad de Dios.

El amor egoísta no trae felicidad, ni paz, sino hay que ocasiona grandes problemas. Por ejemplo: Cuántas veces hay distanciamiento entre hermanos porque los dos son orgullosos y ninguno quiere ceder, ni perdonarse. ¡ Cuántos matrimonios deshechos por no querer dar su brazo a torcer!

El que verdaderamente ama, todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo acepta y todo lo soporta. No importa si es una relación de pareja o en cualquier otra circunstancia de la vida.

Cristo antes de subir a los cielos, después de su Resurrección, le encargó a sus apóstoles: "Ámense los unos a los otros como yo los he amado". Y este mandato no es sólo para las parejas, sino para todos ... Amar como Él nos amó ... que sencillo pero a la vez que difícil ... 

Tenemos que seguir su ejemplo como cristianos. Dios nos creó para amar, somos frutos del amor, y nuestra vida, acciones y palabras deben estar encaminadas al amor. 

Aplicaciones en la vida diaria:

Entender que hemos nacido para amar. Y que todos a través del amor, a ejemplo de Cristo, tenemos la oportunidad de cambiar el rumbo del mundo, de nuestra familia.

Preguntémonos

¿Sabemos perdonar? ¿ De verdad olvidamos de corazón las ofensas que recibimos?
¿Estamos dispuestos a ayudar a todos por amor?


Autor: P. Felipe 



La oración de los esposos

Dedicada especialmente a todos aquellos matrimonios que han podido hacer frente a las adversidades apoyados en la fe y amor a Cristo.
 'El hombre... se unirá a su mujer' tan íntimamente que 'los dos serán una sola carne', nos induce siempre a dirigirnos a lo que el texto bíblico expresa con anterioridad respecto a la unión en la humanidad, que une a la mujer y al varón en el misterio mismo de la creación.


Señor, nuestro Dios
te bendecimos por tomar
en tus manos nuestro amor.
Ayúdanos a cumplir
nuestra misión.
Ven a compartir nuestra vida.
Ayúdanos a formar a
nuestros hijos, a ser
testigos de tu amor
en nuestra familia
y en la comunidad.
Danos fuerza en los desalientos.
 Comparte nuestras alegrías. 
Señor, bendice nuestro amor. 
Amén.


Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...

¿Te ha sido de utilidad el blog?

¿Trabajar o criar a los hijos?

♥

♥Consagración a la Virgen María

♥Consagración a la Virgen María

CONSAGRACIÓN DEL MATRIMONIO AL CORAZÓN INMACULADO DE MARÍA

CONSAGRACIÓN DEL MATRIMONIO AL CORAZÓN INMACULADO DE MARÍA
"Oh, Corazón Inmaculado de María, refugio seguro de nosotros pecadores y ancla firme de salvación, a Ti queremos hoy consagrar nuestro matrimonio. En estos tiempos de gran batalla espiritual entre los valores familiares auténticos y la mentalidad permisiva del mundo, te pedimos que Tu, Madre y Maestra, nos muestres el camino verdadero del amor, del compromiso, de la fidelidad, del sacrificio y del servicio. Te pedimos que hoy, al consagrarnos a Ti, nos recibas en tu Corazón, nos refugies en tu manto virginal, nos protejas con tus brazos maternales y nos lleves por camino seguro hacia el Corazón de tu Hijo, Jesús. Tu que eres la Madre de Cristo, te pedimos nos formes y moldees, para que ambos seamos imágenes vivientes de Jesús en nuestra familia, en la Iglesia y en el mundo. Tu que eres Virgen y Madre, derrama sobre nosotros el espíritu de pureza de corazón, de mente y de cuerpo. Tu que eres nuestra Madre espiritual, ayúdanos a crecer en la vida de la gracia y de la santidad, y no permitas que caigamos en pecado mortal o que desperdiciemos las gracias ganadas por tu Hijo en la Cruz. Tu que eres Maestra de las almas, enséñanos a ser dóciles como Tu, para acoger con obediencia y agradecimiento toda la Verdad revelada por Cristo en su Palabra y en la Iglesia. Tu que eres Mediadora de las gracias, se el canal seguro por el cual nosotros recibamos las gracias de conversión, de amor, de paz, de comunicación, de unidad y comprensión. Tu que eres Intercesora ante tu Hijo, mantén tu mirada misericordiosa sobre nosotros, y acércate siempre a tu Hijo, implorando como en Caná, por el milagro del vino que nos hace falta. Tu que eres Corredentora, enséñanos a ser fieles, el uno al otro, en los momentos de sufrimiento y de cruz. Que no busquemos cada uno nuestro propio bienestar, sino el bien del otro. Que nos mantengamos fieles al compromiso adquirido ante Dios, y que los sacrificios y luchas sepamos vivirlos en unión a tu Hijo Crucificado. En virtud de la unión del Inmaculado Corazón de María con el Sagrado Corazón de Jesús, pedimos que nuestro matrimonio sea fortalecido en la unidad, en el amor, en la responsabilidad a nuestros deberes, en la entrega generosa del uno al otro y a los hijos que el Señor nos envíe. Que nuestro hogar sea un santuario doméstico donde oremos juntos y nos comuniquemos con alegría y entusiasmo. Que siempre nuestra relación sea, ante todos, un signo visible del amor y la fidelidad. Te pedimos, Oh Madre, que en virtud de esta consagración, nuestro matrimonio sea protegido de todo mal espiritual, físico o material. Que tu Corazón Inmaculado reine en nuestro hogar para que así Jesucristo sea amado y obedecido en nuestra familia. Qué sostenidos por Su amor y Su gracia nos dispongamos a construir, día a día, la civilización del amor: el Reinado de los Dos Corazones. Amén. -Madre Adela Galindo, Fundadora SCTJM

CONSAGRACIÓN DEL MATRIMONIO A LOS DOS CORAZONES EN SU RENOVACIÓN DE VOTOS

CONSAGRACIÓN DEL MATRIMONIO A LOS DOS CORAZONES EN SU RENOVACIÓN DE VOTOS
Oh Corazones de Jesús y María, cuya perfecta unidad y comunión ha sido definida como una alianza, término que es también característico del sacramento del matrimonio, por que conlleva una constante reciprocidad en el amor y en la dedicación total del uno al otro. Es la alianza de Sus Corazones la que nos revela la identidad y misión fundamental del matrimonio y la familia: ser una comunidad de amor y vida. Hoy queremos dar gracias a los Corazones de Jesús y María, ante todo, por que en ellos hemos encontrado la realización plena de nuestra vocación matrimonial y por que dentro de Sus Corazones, hemos aprendido las virtudes de la caridad ardiente, de la fidelidad y permanencia, de la abnegación y búsqueda del bien del otro. También damos gracias por que en los Corazones de Jesús y María hemos encontrado nuestro refugio seguro ante los peligros de estos tiempos en que las dos grandes culturas la del egoísmo y de la muerte, quieren ahogar como fuerte diluvio la vida matrimonial y familiar. Hoy deseamos renovar nuestros votos matrimoniales dentro de los Corazones de Jesús y María, para que dentro de sus Corazones permanezcamos siempre unidos en el amor que es mas fuerte que la muerte y en la fidelidad que es capaz de mantenerse firme en los momentos de prueba. Deseamos consagrar los años pasados, para que el Señor reciba como ofrenda de amor todo lo que en ellos ha sido manifestación de amor, de entrega, servicio y sacrificio incondicional. Queremos también ofrecer reparación por lo que no hayamos vivido como expresión sublime de nuestro sacramento. Consagramos el presente, para que sea una oportunidad de gracia y santificación de nuestras vidas personales, de nuestro matrimonio y de la vida de toda nuestra familia. Que sepamos hoy escuchar los designios de los Corazones de Jesús y María, y respondamos con generosidad y prontitud a todo lo que Ellos nos indiquen y deseen hacer con nosotros. Que hoy nos dispongamos, por el fruto de esta consagración a construir la civilización del amor y la vida. Consagramos los años venideros, para que atentos a Sus designios de amor y misericordia, nos dispongamos a vivir cada momento dentro de los Corazones de Jesús y María, manifestando entre nosotros y a los demás, sus virtudes, disposiciones internas y externas. Consagramos todas las alegrías y las tristezas, las pruebas y los gozos, todo ofrecido en reparación y consolación a Sus Corazones. Consagramos toda nuestra familia para que sea un santuario doméstico de los Dos Corazones, en donde se viva en oración, comunión, comunicación, generosidad y fidelidad en el sufrimiento. Que los Corazones de Jesús y María nos protejan de todo mal espiritual, físico o material. Que los Dos Corazones reinen en nuestro matrimonio y en nuestra familia, para que Ellos sean los que dirijan nuestros corazones y vivamos así, cada día, construyendo el reinado de sus Corazones: la civilización del amor y la vida. Amén! Nombre de esposos______________________________ Fecha________________________ -Madre Adela Galindo, Fundadora SCTJM

¿Conoces alguna embarazada que necesita ayuda?

¿Conoces alguna embarazada que necesita ayuda?
4219037/154168469

Clic


Translate

Photobucket

Experimentación fetal, transplantes, cosmética y su relación con el aborto provocado.

Mis archivos para compartir

Iniciado el 28/01/16










Photobucket


Photobucket

♥Oremos con corazón sincero


Photobucket



Photobucket

Wikipedia

Resultados de la búsqueda

MIS BANNER



Photobucket

Photobucket

Photobucket

Photobucket


Si a la vida Headline Animator

Si a la vida

Marcha nacional

Marcha nacional
#Por tu familia

Revista familia y vida

5 Actitudes que aprendemos dentro de la #Familia según el #PapaFrancisco

5 Actitudes que aprendemos dentro de la #Familia según el #PapaFrancisco

Macri representa la codicia neoliberal

Macri representa la codicia neoliberal
Ni salud ni educación ni erradicación de pobreza, solo aporte para la ignorancia y la medicrodidad burguesa